BEATIFICACIÓN
DE MONSEÑOR ROMERO, 23 DE MAYO DEL 2015
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En nuestra
revisión de libros que elucidan la vida del Beato Óscar Romero nos detenemos a
considerar un libro que verdaderamente revolucionó la imagen del arzobispo
mártir de tal manera que, más que cualquier otro factor en el proceso, facilitó
su beatificación. Se trata de Primero Dios, vida de monseñor Romero, por
Roberto Morozzo della Rocca, Edhasa, Buenos Aires, 2010, 500 páginas. Pero, no se deje llevar por este bloguero:
mejor créaselo al Papa Benedicto XVI, quien calificó el
libro como “una biografía importante, que
aclara muchos puntos de la cuestión”.
La innovación
del Prof. Morozzo surge desde tres novedades.
En primer lugar, Morozzo se basa de forma dramática sobre las palabras
del mismo Mons. Romero, dejándolo contar su propia historia y hablar por su
propia cuenta a través de sus homilías, sus cartas pastorales, sus diarios, y
sus otros escritos y discursos. En
segundo lugar, Morozzo paralelamente estudia la historia eclesial y política de
la época y analiza la relación entre los desarrollos en estas esferas con la
evolución del pensamiento de Romero. Y
en tercer lugar, Morozzo no es reacio a desmantelar los mitos que habían
crecido alrededor de la figura de Romero cuando estos no obedecen a los
hallazgos de su investigación de los hechos.
Un ejemplo clave de esto es la mitología de la supuesta “conversión”
repentina y drástica de Romero a partir del asesinato del P. Rutilio
Grande. Morozzo reconoce que el hecho
fue un punto crucial en el ministerio de Romero, pero marca con precisión el
límite de los efectos de dicho acontecimiento.
Si el método
del Prof. Morozzo parece directo y sencillo, la idea de que un historiador
italiano llegara a hacer el trabajo no tenía ninguna garantía de ser exitosa. Morozzo había centrado sus investigaciones anteriores
sobre conflictos europeos y africanos en la era pos «guerra fría». Para hacer esta labor, Morozzo tuvo que
empaparse de la historia de un país casi insignificante (por lo menos en
tamaño, alcance económico, y estudio interno) de un continente para él desconocido. Tuvo que aprender español, y también el
idioma cultural de la América Latina y de la iglesia latinoamericana. Al final de cuentas resulta que lo que
pareciera limitación al principio fue precisamente lo que permitió a Morozzo
ver esta realidad con ojos frescos, con una mirada nueva y con un punto de
vista no contaminado de ideas preconcebidas.
Antes de Primero Dios, prevalecía la noción en
ciertos círculos eclesiales de que Mons. Romero había sido excesivamente
parcializado políticamente en sus pronunciamientos y que, por ende, su muerte
había sido un cálculo estratégico por parte de un sector en el poder para
neutralizar la oposición y evitar perder el poder—en fin, un asesinato
netamente político. Morozzo ataca esa
tesis metódicamente, desde el título del libro, que usa la expresión popular
salvadoreña, que significa “Dios mediante” o “Si Dios quiere”, para indicar, en
primer lugar, una visión por parte de Mons. Romero que pone preferencialmente a
“Dios sobre todo”, en las palabras de Mons. Vincenzo Paglia cuando presentó la
vida de Mons. Romero durante la ceremonia de beatificación. En segundo lugar, al usar la expresión
salvadoreña como título del libro, Morozzo está enviando una señal que hay un dialecto
local que es necesario entender para poder interpretar debidamente a Mons.
Romero. Habían palabras, términos, modos
de pensamiento y de análisis en El Salvador del final de los años 70 que nos
pueden parecer disonantes en nuestra realidad, que anclaron a Romero en su
momento y le dieron urgencia y relevancia a sus palabras, siendo parte del
discurso vigente de su época y de su audiencia.
En contra de
la tesis política del asesinato Romero, Morozzo propone que lo asesinaron por
las denuncias públicas que éste hacía, que estuvieron motivadas por su fe y por
tanto eran expresiones de esa fe. Cuando
los poderosos vieron que la predicación de Romero estaba iluminando el pueblo,
no podían soportarlo y eso desató la ira de los acaudalados. Ante la emanación popular de fe que irradiaba
desde Romero, la reacción de los poderosos fue odiarla, y ese odio se
transformó en violencia, y esa violencia arremetió contra Romero, acabando con
su vida. Este análisis fue recibido como
lluvia sobre el desierto en círculos eclesiales. El periódico oficial del Vaticano dedicó tres
tercios de una página a la reseña del libro y al final se refirió a Mons.
Romero como “el arzobispo mártir
asesinado por la fe en el altar”.
Cinco años después de su publicación, Mons. Romero fue beatificado (el
Prof. Morozzo también tuvo a cargo la “Positio”
sobre Romero entregada a la Congregación para las Causas de los Santos).
En fin, Primero Dios es el libro más impactante
sobre el Beato Óscar Romero.
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| Con el autor en San Salvador después de la beatificación de Mons. Romero. |
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