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AÑO
JUBILAR por el CENTENARIO del BEATO ROMERO, 2016 — 2017:
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| Lona vacía sobre el cual se creará una nueva imagen de Romero para la Catedral de San Salvador en relación con su esperada canonización. Foto cortesía B. Hernández. |
Siguen
llegando las indicaciones de que el 2018 va a ser “el año” del beato Óscar A. Romero. Una de las más recientes es la publicación en
su blog y
por Twitter
del postulador de la causa, Mons. Vincenzo Paglia, de información
publicada originalmente en este blog sobre el
mismo tema, augurando la próxima conclusión del proceso. [Ver también Predicción:
“San Romero”, 2018.]
Interrogado
sobre las perspectivas de canonización, el cardenal salvadoreño Gregorio
Rosa Chávez, de visita en Barcelona, España, respondió: “Esperamos
que la noticia llegue cuanto antes”. Según varios medios, el Cardenal Rosa Chávez
agregó que “el Santo Padre está impaciente porque llegue el momento”, y
definió el proceso como un “terremoto espiritual” que le espera
a su país, asegurando que El Salvador está “descubriendo”
a Mons. Romero después de su beatificación en mayo del 2015.
Si lo que
viene es un “terremoto espiritual”, entonces Bellini Hernández, una integrante
de un grupo laico llamado Cultura Romeriana en San Salvador, experimentó un
sismo premonitor cuando llegó a Catedral Metropolitana el domingo pasado y
descubrió que las imágenes de Romero que habían adornado el templo habían sido
removidas. Perturbada por el hecho, ya
que Cultura Romeriana había regalado una de las imágenes, la feligresa decidió
cuestionar al P. Francisco Góngora, el párroco de Catedral.
“Él me contestó que es porque están
preparando un retablo grande y así mismo un cuadro grande de Mons. Romero”,
dice Hernández, “con motivo de la
canonización de Mons. Romero”.
Contactado por
Súper
Martyrio, el P. Góngora confirmó los planes. “Le
propuse al arzobispo hacer un lugar en la catedral dedicado a Mons. Romero, y
cómo no tenemos una capilla le hice unos planos para hacer en lo alto un
retablo siguiendo la sintonía del fondo del presbiterio y así que él [Romero] represente
al Buen Pastor que camina con su pueblo y así se hará”, relata.
La Catedral ha
experimentado una pequeña restauración. El
año pasado, medios locales reportaron un donativo por parte de Taiwán para
ayudar en el proceso. “No sólo Taiwán ha donado; hay alrededor de ocho
empresas que han donado para poder restaurar Catedral”, asegura el párroco. “Todo
el dinero que se ha recibido ha sido íntegramente invertido en los trabajos de
Catedral incluyendo el cambio de tuberías de aguas negras y la
impermeabilización del techo interior que estaba destruido. Además, la Cripta
no ha sido solo pintada sino también hemos invertido a través de donativos de
las distintas empresas en el piso para cristalizarlo; de igual manera la
entrada a la cripta se ha decorado el techo con cielo falso y luminaria”,
finaliza.
Como nota de
pie, no todos están satisfechos con estas medidas. En Facebook, el P. Héctor Fernando Martínez
Espinoza, Vicario General de la Diócesis de Tarahumara, México, expresó consternación
por la remoción de las imágenes de Romero.
“Creemos que si se va a poner
alguna otra imagen de Monseñor, podría no quitarse mientras tanto, el cuadro de
Cultura Romeriana, siendo la única referencia explícita en el templo
catedralicio”, escribió el sacerdote desde México. El P. Góngora descarta la crítica, postulando
que “la Iglesia es jerárquica no
democrática”, y que la decisión ha sido ventilada y merece ser respetada, “porque yo respeto cada territorio diocesano
y por ello pido respeto al mío”.
Catedral se
prepara para una canonización, pero El Salvador debe prepararse para un
“terremoto espiritual” en que seguramente habrá muchos rumores y murmuraciones
sobre la mejor manera de recibir y venerar al nuevo santo.
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