Por
Carlos X. (corresponsal en San
Salvador):
Mesurando las
expectativas para la afluencia a la ceremonia y los estimados que se manejan
extraoficialmente este día, tenemos suficiente confianza para declarar que estamos
ante la ceremonia de beatificación más grande de la historia que no fuese
celebrada por un papa. El Pbtro. Luis Ernesto Ayala, de la comisión organizadora ha dicho a Súper Martyrio que los estimados iniciales de la PNC hablan de mas de de medio millón de personas en el acto de beatificación. Ha habido
beatificaciones, especialmente aquellas llevadas a cabo durante los viajes
papales de San Juan Pablo II que han reunido a muchedumbres numerados en hasta
un millón de personas o más alrededor de la presencia del papa. Pero, si quitamos estas del escenario, esta
beatificación de Mons. Romero es verdaderamente impresionante, aún más si
tomamos en cuenta que ocurrió en un pequeño país centroamericano, con solo dos
meses de aviso.
Según los datos que
prevemos tener, estaríamos superando hoy los 300 mil que estuvieron presentes
para la beatificación del Padre Pío en el Vaticano el 2 de mayo de 1999.
La afluencia también
ha sido mayor al entre 250 y 300 mil que presenciaron la beatificación de la
Madre Teresa, también en el Vaticano el 19 de octubre del 2003.
Mayor también que los
250 mil que acudieron a la beatificación vaticana del fundador del Opus Dei,
Josemaría Escrivá de Balaguer el 6 octubre del 2002, y los 250 mil que
acudieron a la beatificación de su sucesor Don Álvaro del Portillo el 27 de
septiembre del 2014 en Madrid.
Este día Mons. Romero
ha resucitado en su Pueblo, y ha hecho historia en su Iglesia.
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